Actitud Coaching Mallorca Coachingpro

A continuación te detallamos las 7 siguientes técnicas para ENTRENAR y MEJORAR nuestra actitud, siempre teniendo en cuenta que esta DEPENDE DE MI.

¿Por qué en un día de lluvia, muchos pensarán y sentirán que es un mal día mientras que otros pensarán que así es como la naturaleza limpia el ambiente o simplemente actuarán de igual modo que si el día fuese soleado o incluso mejor? Tú decides la forma en que ves las cosas y actúas en consecuencia porque nuestra actitud condiciona nuestra forma de pensar, nuestras acciones y reacciones y por lo tanto, nuestros resultados.

ACTITUD –> PENSAMIENTO –> COMPORTAMIENTO –> RESULTADOS

Estas son las 7 herramientas a añadir a las 7 que compartimos en nuestro anterior post:

1. Comparte tu actitud positiva con otros: aunque muchas personas estén sufriendo situaciones y circunstancias complicadas, no significa que otras no estén bien y puedan transmitirlo a los demás. Parece que compartiendo nuestros logros o simplemente nuestra actitud y estado positivo estamos molestando a los demás. Los que te quieren y respetan se alegrarán por ti, y siempre puedes alegrarles y “contagiarles” a ellos.

2. No generalizar:  No generalices en tus pensamientos o en lo que dices porque determinará tu actitud. Frases como: “nadie me quiere”, “No sirvo para nada” o “soy un desastre” que algunas personas suelen utilizar a menudo, ni son ciertas ni nos ayudan a estar mejor porque siempre hay alguien que te quiere, siempre sirves para algo o aunque seas un desastre en algo, siempre eres muy bueno en otra cosa.

3. Empieza a cambiar tus accionesEsta herramienta es de una lógica aplastante aunque también es cierto que nos cuesta llevarla a cabo porque supone un cambio en nuestra forma de pensar, de sentir y en definitiva, de actuar. Pero debemos centrarnos en que: si tu forma de hacerlo hasta ahora no te ha llevado a tener una gran actitud, ¿no crees que deberías empezar a cambiar alguna cosa? Cambia pocas cosas y hazlo poco a poco, pero hazlo YA, enfocándote y actuando en busca de una actitud que te lleve a unos mejores resultados.

4. Cuida tu imagen: recuerda que una imagen dice más que mil palabras y como te ven te tratan.  “Hoy me pongo cualquier cosa”, “da igual, no me pinto” o “así mismo ya voy bien” son algunas de las cosas que nos decimos cuando estamos con una actitud más bien negativa. Cuando peor nos sentimos más debemos forzarnos para estar bien. No significa que arreglándome estaré bien, pero ten por seguro que te sentirás mejor que si no lo haces.

5. Modela a personas que admires: Aclaremos primero el término. Modelar no significa copiar sino coger a alguien como modelo en alguna característica concreta que nos interese aprender o mejorar y observar cómo lo hace, qué dice, cómo actúa. Una vez tenemos esos datos, lo ponemos en práctica adaptándolos a nosotros mismos, a nuestro carácter, a nuestras habilidades. Por ejemplo, para mejorar nuestra actitud, centrémonos en alguien que conocemos y que la tiene muy positiva. ¿Qué haría en tu lugar esa persona?

6. Bombardéate en positivo:  Tendemos a bombardearnos en negativo: escuchando a compañeros quejarse, viendo los telediarios o escuchando noticias en la radio, etc. Sin quererlo, éstas nos afectan en negativo por lo que te invito a que te bombardees pero, en este caso, en positivo. ¿Cómo? Leyendo libros, artículos o escuchando conferencias que potencien actitudes positivas, para conseguir que nuestra actitud se vaya transformando.

Eso sí, esto no significa que deba dejar de estar informado de lo que sucede a mi alrededor sino que reduzca la obtención de esa información y aumente la que me aporte cosas positivas.

7. Evitar compararse: Afortunadamente, todos somos diferentes los unos a los otros y la comparación no suele generar una actitud positiva. Algunas veces o en algunas cuestiones nos sentiremos “peores” a los demás (o a alguien en concreto), pero en otras seremos “mejores” a los demás. Por lo tanto, no te compares y confía más en ti mismo/a.

Trabaja tu actitud sólo o con ayuda del Coaching porque dicen que el 85% de tus resultados dependen de tu actitud; por lo tanto, sólo con la actitud correcta garantizas tu éxito. ¡A por él con un actitud positiva!

Share This